Nadie podría haberlo dicho mejor que Steve Sullivan, autor de numerosos libros especializados en las Mujeres más Glamurosas del siglo 20, en uno de sus libros escribió sobre Betty: “nunca habrá otra chica tan glamurosa como Betty Brosmer. Su rubia belleza americana es equivalente a la de Marilyn Monroe. Su figura maravillosamente contorneada más allá de la perfección no tenía igual. Además, había un brillo, una incandescencia en ella que no se podía encontrar en ninguna otra modelo. Y todo en conjunto era tan ideal que Betty- sin mostrar más partes de su cuerpo que uno pudiera ver en la playa- era la supermodelo definitiva de los años 50”.

Ya desde sus inicios en el año 1949, como modelo adolescente para el catálogo de Sears y Roebuck, la joven Betty aparecía en los principales
anuncios, como imagen de producto y en promociones de mercado, así como en carteles publicitarios de películas Kodak o zapatos Thom McAn por todo el país. Su rostro aparecía regularmente en anuncios publicitarios a página completa en muchas de las revistas principales, entre ellas Esquire, Fortune, Time, Life yThe Saturday Evening Post. Además, no crean que era la clásica rubia tonta, ya que compagino su trabajo de modelo con los estudios, logrando graduarse en psicología por la UCLA.

De 1955 a 1960 Betty aparecería en prácticamente todas las revistas de temática masculina logrando más de 300 portadas en su carrera. Se le invito para que posara para la revista Playboy. Ella accedió he hizo una sesión de fotos con el fotógrafo Arturo de Pablo para la revista de Hugh Hefner, pero las fotografías nunca se publicaron debido a que ella no llego a posar desnuda. Y es que esa era su marca de casa, no veremos más que aquellos "minúsculos" bikinis de la época. No existen desnudos de Betty Brosmer.
En 1961, se casó con Joe Weider,
cofundador de la Federación Internacional de Culturismo y editor de numerosas
revistas. Después de su matrimonio, adoptaría el nombre de Betty Weider,
abandonando su carrera de modelo y pasando a escribir artículos en las revistas
de su marido como Fitness y Muscle & Fitness y en columnas mensuales con el
titulo de "Body for Betty". También ha escrito y publicado libros
sobre nutrición y gimnasia. Su matrimonio, después de medio siglo, todavía
perdura hasta el día de hoy.
Betty Brosmer es la chica glamurosa que personifica lo que la palabra “glamour” significa realmente: belleza, encanto, elegancia, magnetismo, deseo y carisma. Todas estas palabras se han utilizado en las publicaciones que describían a Betty, incluyendo impresionante, cautivadora, irresistible, radiante, exquisita, fabulosa y sensacional.
Betty Brosmer es la chica glamurosa que personifica lo que la palabra “glamour” significa realmente: belleza, encanto, elegancia, magnetismo, deseo y carisma. Todas estas palabras se han utilizado en las publicaciones que describían a Betty, incluyendo impresionante, cautivadora, irresistible, radiante, exquisita, fabulosa y sensacional.